Cerca del 70% del cuerpo humano está compuesto de agua, el más efectivo medio de transporte de nutrientes y desechos dentro y fuera del organismo.
Beber AWA durante el ejercicio físico es fundamental para el rendimiento y también para la salud ya que permite que todo nutriente y elementos indispensables para su funcionamiento lleguen a cada uno de los órganos y los que resulten innecesarios se eliminan a través de la orina o la transpiración. Es muy importante mantenerse hidratado durante cada práctica deportiva, ya que al ser un nutriente vital, el agua hidrata antes, durante y después de cada ejercicio ayudando a rendir un 100%.
Algunos datos a compartir, sobre la hidratación oportuna:
1- De 300-500ml de agua sería suficiente una hora antes del ejercicio, vale con pequeños tragos cada 10-15 minutos y después, ingerir 300-500ml de agua, favorecerá a la recuperación.
2- En ambientes calurosos, no solo se recomienda el beber agua. También bebidas isotónicas, ya que con la sudoración excesiva, la pérdida de sales minerales también se verá afectada.
3- Las principales pérdidas de líquido del cuerpo durante el ejercicio se generan a través del sudor, producido por el aumento de la temperatura corporal. De ahí su función termorreguladora.
4- El sudor, la orina, heces, respiración, el habla, así como la respiración de la piel en reposo son otras formas de liberar agua de nuestro cuerpo.
5- Las pérdidas de agua en el organismo las concebimos a través de la sed, que funciona como nuestro principal indicador de deshidratación.
Es por ello que la temática de la importancia de hidratarse constantemente sin necesidad de sentir sed, es constante. Pues el momento que sentimos sed, nuestro organismo ya está ligeramente deshidratado y esto merma hasta un 20% del rendimiento deportivo.